Durante los años de edad escolar, los niños comienzan a desarrollar un sentido de independencia más sólido.
Las relaciones con figuras adultas en sus vidas (padres/cuidadores, maestros, etc.) siguen siendo las más importantes y significativas, pero las relaciones con los compañeros adquieren cada vez más importancia. Los niños en edad escolar continúan aprendiendo a identificar y expresar sus necesidades, sentimientos y deseos de manera apropiada. A medida que se vuelven más conscientes de sus cuerpos, aprenden sobre la autorregulación, la imagen corporal y las relaciones más complejas con los demás.
Usted asiste en el bienestar social y emocional de su hijo al proporcionar un entorno seguro y respetuoso, y al modelar prácticas sociales y emocionales saludables en su propia vida. Las cosas que su hijo aprende de usted sobre cómo relacionarse con los demás y con ellos mismos contribuyen a su éxito emocional, relacional y académico por el resto de su vida.
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